BEIJING , China — Al menos 46 personas muertas y 16 desaparecidas fueron reportadas luego de un terremoto de magnitud 6.8 que sacudiera el lunes la provincia de Sichuan, en el suroeste de China, provocando aludes y sacudiendo los edificios de Chengdu, la capital de la provincia, cuyos 21 millones de habitantes se encuentran ya bajo un confinamiento implementado por el COVID-19.
El terremoto azotó una zona montañosa en el condado de Luding poco después del mediodía, según el Centro de Redes Sismológicas de China.
Sichuan, situada al borde de la Meseta Tibetana, donde se encuentran dos placas tectónicas, sufre terremotos de forma habitual. Al menos cuatro personas murieron en junio en dos sismos en la región.
El número de muertos se elevó a 46 mientras continuaba la búsqueda de personas atrapadas el lunes por la noche, informó la cadena estatal CCTV. Además, habían 16 personas no localizadas.
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Anteriormente, las autoridades habían informado siete muertes en el condado de Luding y 14 más en el vecino condado de Shimian, al sur. Tres de los fallecidos eran trabajadores de la zona escénica de Hailuogou, una reserva natural de glaciares y bosques.
Además de las muertes, las autoridades reportaron caída de piedras y deslizamientos de tierra en las laderas de las montañas, que causaron daños en viviendas e interrupciones en el suministro eléctrico, según CCTV. Una gran cantidad de cosas materiales bloqueó una carretera rural, dejándola llena de rocas, dijo el Ministerio de Gestión de Emergencias.
Los edificios temblaron en Chengdu, a 125 millas del epicentro. La residente Jiang Danli dijo que se escondió bajo un escritorio durante cinco minutos en su apartamento ubicado en un 31er piso. Muchos de sus vecinos bajaron por las escaleras, temerosos de las réplicas.
“Hubo un fuerte terremoto en junio, pero no fue muy aterrador. Esta vez me asusté mucho, porque vivo en un piso alto y las sacudidas me marearon”, narró a The Associated Press.
El terremoto y el confinamiento por el COVID-19 se produce tras una ola de calor y una sequía que han provocado escasez de agua y cortes de electricidad debido a que Sichuan se alimenta grandemente de energía hidroeléctrica. Todo ello se suma al último gran confinamiento por la estricta política china de “cero COVID”.
Los dos últimos meses en Chengdu “han sido extraños”, aseguró Jiang.
El Servicio Geológico de Estados Unidos registró el sismo del lunes con magnitud de 6.6 y epicentro a 6 millas de profundidad. Es habitual que las mediciones preliminares de las distintas agencias no coincidan.
El terremoto más letal que ha sufrido China en los últimos años fue un temblor de magnitud 7.9 que mató a casi 90,000 personas en Sichuan en 2008. El temblor devastó pueblos, escuelas y aldeas rurales a las afueras de Chengdu.