Durante la tarde del martes, 12 de enero, miembros de la Red Fronteriza por los Derechos Humanos (BNHR, por sus siglas en inglés), junto con otras organizaciones aliadas, se congregaron en el Chihuahuita Park, ubicado en el 400 de la calle Charles Road, para protestar en contra del presidente de los Estados Unidos.
La protesta de nombre “You’re Not Welcome at the Southern Border” surge tras la visita que hizo el presidente Donald Trump a Alamo, Texas, para supervisar la finalización de una sección de 400 millas del muro fronterizo entre los Estados Unidos y México.
Durante el evento, los protestantes pidieron la cancelación de la construcción de dicho muro así como el desmantelamiento de las partes ya existentes. Asimismo, se expresó un rechazo a la retórica antiinmigrante y de odio que, de acuerdo a los participantes, simboliza esta construcción.
“Trump tiene las manos manchadas de sangre y no es bienvenido en la frontera. Tampoco lo es la violencia y la retórica y acciones antidemocráticas que él representa y sigue fomentando. El asalto de la semana pasada al Capitolio de los Estados Unidos y nuestras instituciones democráticas son los ejemplos más recientes de la violencia y el odio que ha incitado durante su mandato, pero de ninguna manera son los únicos. Sus políticas y retórica también son responsables del ataque de supremacistas blancos en un Walmart de El Paso en el 2019 que se cobró la vida de 23 personas y la violencia infligida a activistas pacíficos de Black Lives Matter por la policía el año pasado en protestas a nivel nacional tras el asesinato de George Floyd, Breonna Taylor y muchas otras personas de raza negra y morena a manos de las fuerzas del orden”, dijo Fernando García, director ejecutivo de BNHR. “En lugar de pasar sus últimos días en la oficina abordando la apremiante pandemia del COVID-19 y asegurando una transición ordenada, Trump está redoblando su agenda xenófoba y supremacista blanca”.
