Desde 2016, gasolineras mexicanas dejaron de adquirir combustibles a la petrolera nacional y las empresas importadoras porque compraban huachicol para venderlo al público, reveló el lunes la secretaria de Energía, Rocío Nahle.
La funcionaria del Gobierno que encabeza Andrés Manuel López Obrador dijo que se hallazgo se inscribe en la estrategia contra el robo de combustible (huachicoleo, como se le dice en México) y es prueba del delito que estaban cometiendo.
Durante una seión de trabajo con la Tercera Comisión de la Permanente en la Cámara de Diputados, Nahle aseguró que antes del cierre de ductos cada día se robaban 2 millones de litros de combustible y, de seguir esa tendencia, las pérdidas este año habrían sido superiores a 70,000 mil millones de pesos.
El presidente López Obrador ha dicho que tomó la decisión de cerrar los ductos, pese a que provocó desabasto en 10 estados, porque el robo se traducía en en pérdidas anuales por 65,000 millones de pesos, unos $3,400 millones.
Nahle dijo que la estrategia impulsada desde el gobierno se refleja en la disminución de los robos en 5,000 millones de pesos, unos $262 millones.
