La villa conocida como Fort Bliss brinda a sus soldados la oportunidad de entrenar en alrededor de cinco cuadras, ya que esta región es una de las mejores a nivel nacional debido a su parecido con las regiones en el Medio Oriente.
Siendo lo más similar a un combate, un despliegue de elementos de la base militar de esta villa se lleva a cabo con entrenamientos continuos que tienen el objetivo de mantenerse preparados en caso de un ataque.
“Sucede en el mundo y tenemos que estar preparados para cualquier cosa y a donde nos van a mandar”, dijo la teniente, Rosy Poulos.
En casos de guerra, los soldados necesitan desarrollar su destreza, inteligencia, tácticas para combatir y, por supuesto, el armamento y la tecnología adecuados, algo que el presidente Donald Trump busca extender para el próximo año fiscal al aumentar el presupuesto de $715 millones a $750 millones de dólares.
Una parte de los entrenamientos mencionados se enfoca en asegurarse de que los soldados entiendan de lo que se trata una guerra y que, además, tengan una amplia imagen de lo que verán en combate antes de que partan a su lugar de misión.
En un periodo de dos horas, los miembros de la fuerza armada en Fort Bliss demostraron lo que han ensayado desde hace algunos meses atrás al auxiliar a sus compañeros e identificar su objetivo con el apoyo de tanques de guerra y bombas de humo.
Cabe destacar que son alrededor de 4 mil participantes quienes participan en estos entrenamientos, en donde los operativos varían con tácticas que requieren de 10 a 20 elementos a tácticas donde se necesitan hasta 300 soldados.
